Conservación de la leche materna
La leche materna puede manejarse de diferentes maneras, para que se pueda consumir ya sea de manera inmediata o reservarse como parte de un banco de leche. Todo depende del uso que quieras darle.
Algunas reglas generales:
- Lava siempre tus manos antes de extraer y manipular la leche, así como mantener limpios el extractor y recipientes en donde conservarás la leche.
- Para los recipientes en donde almacenarás la leche, hay muchos disponibles en el mercado, o bien puedes usar recipientes de plástico (alimentos) o cristal, pero asegúrate que sean de tapa de plástico y no de metal, porque éstos pueden contaminar la leche si se oxidan. No te recomendamos utilizar frascos de recolección de orina.
- Siempre ofrece a tu bebé la leche más fresca posible, y reserva para casos de emergencia el darle leche de tu banco.
- Rotula con fecha/hora las extracciones que realizas.
- No descongeles la leche en el microondas y evítalo en lo posible para calentar la leche*. Idealmente debes calentar agua en un cazo y, una vez fuera del fuego, colocar el envase con la leche extraída, a modo de baño maría, pero con el agua no a fuego directo.
- La leche que entra en contacto con la saliva de tu bebé, es una leche que debe ser consumida. Si hay sobrantes no pueden reutilizarse, refrigerarse o re congelarse, por el riesgo de proliferación de bacterias, solo puede consumirse dentro de la hora siguiente.
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Manejo de Leche Extraída.
Cuando recién extraes tu leche, puedes optar por varias opciones de almacenamiento, considerando el momento estimado de consumo:
- Consumo Inmediato. En temperatura ambiente máxima de 25°C, tiene una duración máx. de 6 hrs.
- Consumo en el día. Refrigérala, en temperatura de 0 a 4° tiene una duración máx. de 5 Días.
- Consumo en otro día. Depende de en cuantos días lo planeas, supongamos que lo planeas entregar en la semana (considerando 5 días máx.), puedes mantenerlo en el refrigerador, si es para mayor cantidad de tiempo, considera estos lineamientos:
- Congelador integrado en refrigerador. Duración máx. de aprox. 2 semanas. Esto por el constante abrir-cerrar del refrigerador.
- Congelador separado del refrigerador. Duración máx. de aprox. 6 meses. Se abre menos que un congelador integrado, pero aun así lleva un uso.
- Congelador exclusivo. Duración máx. aprox. 12 meses. Hablamos de un congelador separado, sin refrigerador, exclusivo para uso de la leche materna.
Cuando decides congelar la leche, refiere tal cual al manejo y administración de tu Banco de Leche.
Descongelar leche materna
- Si te ves en la necesidad de utilizar leche de tu banco (leche congelada) procura descongelar la leche más antigua, de esta manera tu banco se va manteniendo “fresco”.
- No descongeles la leche a temperatura ambiente, por el riesgo de proliferación de bacterias, lo recomendable es descongelarla como te describimos líneas arriba, si no la vas a descongelar de manera inmediata, procura mantener la cadena de frío, es decir, del congelador al refrigerador y del refrigerador se puede transportar en una nevera portátil con hielo hasta poder calentarla. En esta cadena, se manejan los tiempos de conservación de la siguiente manera:
- Leche del congelador al refrigerador: 24 hrs.
- Leche del refrigerador a nevera con hielo: 4 hrs.
- Leche del congelador a nevera con hielo: 24 hrs.
- Toda la leche congelada que ha sido descongelada, no puede volver a congelarse, bajo ninguna circunstancia.
Consistencia y Sabor de la leche.
- Durante el proceso de conservación de la leche, es normal que se vea una capa natosa. Basta con sacudir un poco la leche para integrarla nuevamente. No significa que esté echada a perder.
- Es posible que tu leche descongelada huela raro, algunas mujeres refieren un olor agrio, rancio o jabonoso. Esto se debe al cambio de la estructura de los lípidos por el proceso de congelación/descongelación. No significa que no sirva, si se maneja dentro de los parámetros de tiempo correctos, sirve para consumo.
- Puede que tu bebé no acepte de primera instancia la leche materna en biberón, y esto es normal. Nuevamente, si has seguido las recomendaciones del manejo y conservación de leche materna, probablemente no es un tema de que la leche se haya descompuesto, sino más bien se refiera al hecho de que se prefiere tomar “directamente de la fuente” que de un biberón.
Si este fuera el caso, busca apoyo con asesor de lactancia para encontrar la mejor manera de que tu bebé se alimente con leche materna aun si no te tiene cerca.
Recomendaciones finales.
- Al congelar la leche procura colocarla en la parte más al fondo y alejada de la puerta posible.
- Recuerda mantener una limpieza constante de tu extractor, así como sus aditamentos, la leche materna contiene grasa que si no se limpia enseguida se pega a los componentes y dificulta la limpieza posterior. Adicional a que una limpieza correcta te asegura evitar la proliferación de bacterias que pasen a la leche materna.
- Puedes juntar varias extracciones del día, con la condición que al juntarlas ambas estén a la misma temperatura, ya que si no puede haber un desbalance en la composición. Si tienes leche en el refrigerador y acabas de extraerte, primero pon la leche recién extraída al refri para posteriormente mezclarla con la que ya tenías previamente.
- No existen biberón o tetina en el mercado que sea “el mejor” para la lactancia. Ergonómicamente, tu pezón al ser succionado por tu bebé, se pega al paladar de éste y se estira para alcanzar la parte profunda de su boca, esto sucede por la textura y material del pezón, que no ha sido replicado por ningún biberón o tetina. Éstos al ser de plástico semi-rígido, entran de manera plana a la boca y no logran esa posición.
Habiendo dicho lo anterior, es probable que inviertas un poco hasta que encuentres el biberón que le acomode a tu bebé.
*El uso del microondas no se recomienda, debido a que si se usa inadecuadamente puede destruir la mayoría de las células vivas que contiene la leche materna, aunque no altere su valor nutricional.
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