
¿Has pensado en empezar un banco de leche materna, pero no sabes por dónde comenzar?
¿Ves botellas llenas en redes sociales… mientras tú apenas logras sacar 30 ml?
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Tranquila. Aquí va una verdad poderosa:
Hacer un banco de leche no es cuestión de litros. Es cuestión de intención, constancia y mucho amor propio.
Este blog es para ayudarte a empezar con calma, con realismo y sin culpa.
Un banco de leche es una reserva de leche materna extraída y almacenada, para usar cuando no puedas amamantar directamente.
Sirve para:
Tu regreso al trabajo
Viajes o ausencias
Compartir la alimentación con tu pareja o cuidador
Tener tranquilidad de contar con una opción flexible y segura
Y no, no necesitas tener 100 oz congeladas para hacerlo bien. Lo importante es que tu banco funcione para ti y tu bebé.
🕓 1. Comienza después de las 4 semanas de vida
Eso permite que tu lactancia directa esté bien establecida y no interfieras con la producción natural.
📅 2. Define tu fecha objetivo
Empieza al menos 20 días antes de cuando necesites usar tu leche. Así le das tiempo a tu cuerpo para adaptarse.
🍼 3. Elige un buen extractor
Uno doble y eléctrico puede hacer tu rutina más rápida y eficiente. Asegúrate de que sea cómodo y fácil de usar.
⏰ 4. Extrae entre tomas
Lo ideal es hacerlo una hora después de amamantar (o una hora antes de la próxima toma) para no quitarle leche al bebé.
💆♀️ 5. Masajea el pecho antes de extraer
Esto estimula el reflejo de eyección de leche y facilita una extracción más fluida.
⏳ 6. Haz sesiones de 15 minutos por pecho
Si tienes poco tiempo, también puedes hacer extracciones cortas pero frecuentes.
🔖 7. Etiqueta y refrigera cada extracción
Apunta fecha y hora. Así sabrás qué leche usar primero y mantendrás tu banco organizado y seguro.
🔁 8. Sé constante. La rutina es tu aliada
Tu producción crecerá con el tiempo. No se trata de cantidad inmediata, sino de repetición amorosa.
No se trata de “llenar el congelador”.
Se trata de crear un sistema que te acompañe en tu maternidad real, que te dé libertad y opciones sin sumar presión.
Cada gota cuenta.
Cada sesión suma.
Cada paso que das es un acto de cuidado hacia ti y tu bebé.
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Porque desde tu pecho… nace un universo de amor. 🌌
Fuentes confiables:
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